Llegará el día
en que tus manos sean la razón de mi desvelo,
el cántaro que empape mi blancura de nube,
mi bálsamo tus besos,
tu sueño mi deleite,
mis manos tu locura
y tus ojos mi baño de oro…
Llegará el día
en que ya no serás el mismo hombre,
habrás pasado el umbral de mi cielo,
tu cuerpo será mío y el mío tuyo,
sin timidez ni miedo.
Te sentirás un hombre nuevo,
siendo tu piel morena mi refugio de besos
y tu boca el deleite
de mis amaneceres, siempre...
Salma Hassan
11/11/2012