El hilo de este reino


Este blog ha acompañado el crecimiento de mi humilde obra desde 2008. En él guardo versos improvisados, poemas que amo y letras sueltas, pero todos ellos conforman este puzzle que soy, un ser en crecimiento, una amante de la palabra, un sueño de poeta.
Sandra Gutiérrez Alvez (Salma)

lunes, 24 de noviembre de 2008

Mar y bruma...


Mar y bruma


Viajo a través del tiempo y a escondidas,
para que él ya no pueda percatarse de mi paso.
Y veo una ola por la bruma perseguida,
en este viaje, de cruceros y naufragios

Ella es recia y dura... y golpea,
mientras que la bruma acaricia su belleza...
Y de la nube observo su inocencia,
que siendo agua, se eleva vaporosa…
porque es diáfana, fría y vulnerable,
y se deja trasportar entre las olas.

De sirenas el canto se oye lejos
con aroma de sal y de quimera:
¡Suéltala, no la detengas,
ella estará a tu lado siempre que tú quieras!

Porque tu eres bruma y ella es ola,
porque eres vapor y ella es agua,
los dos de una misma esencia,
diferentes, solitarios, transparentes, alocados,
los dos... ola y bruma, mar y cielo.
Los separa sólo la ilusión que aguarda
en una curva en el horizonte en calma.
Más, por el viento que azota hoy en la orilla,
ella es recia y dura... y golpea,
y tú eres bruma volando sobre ella.

Y a lo lejos el canto de sirenas
me resuena entre mi piel de seda:
¡Suéltala, no la detengas,
ella estará a tu lado siempre que tu quieras...!







Seda





jueves, 20 de noviembre de 2008

Donde hay sueños... todavía hay esperanzas...
porque ellos nos llevan a actuar,
y crean puentes hacia el mundo!!!
por los sueños de todos los niños
20 de noviembre
Día internacional de los derechos del niño.
porque por el derecho a soñar y ser feliz, aún no se han escrito leyes,
los creadores escribimos por todos ellos.
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Hacia tu orilla
Voy a crear un puente hacia tu orilla…
Un puente de olas infinitas,
Con los últimos suspiros que me quedan,
Con la paciencia, el perdón, la redención y la ausencia…
Voy a enhebrar cada lágrima tuya y cada lágrima mía,
cada momento que pude verte en el cristal,
Perdido entre la niebla, llorando por la injusticia…
Voy a usar tu dolor y el mío
Voy a usar el dolor de todos, Como irrompible malecón...
Para que cruces el inmenso mar… Y regreses a mí lado…
Dejé hace muchos años una barca en la orilla,
Pero preferiste obviarla, olvidarla…
Ni siquiera percataste su presencia…
Tu lozanía era tal que yo casi no existía…
Tu risa fue un premio y un anzuelo…
Tu ideal una trampa…
No debiste jugar a ser Dios…
Aunque valió la pena el resultado
El dolor y el odio se apoderaron de los dos...
Tu eterna frescura no pudo mostrarte
que al hombre orgulloso
no le es suficiente su vida para alcanzar la verdad…
ni su juventud para llegar a la felicidad.
y que llevar un héroe en el corazón es peligroso,
pero gratificante si medimos las consecuencias
porque enseñar con el dolor no es para todos,
sólo para los que saben hacerlo con entrega y amor.
Pero…voy a crear un puente hacia tu orilla
Y una escalera hacia la torre en que me encuentro
En la que me refugie de todo,
pero no pude refugiarme del tiempo…
Vas a encontrarme más vieja aún, pero más sabia,
Y espero que hablemos de tus sueños y los míos…
De los sueños de los hombres, de los que aún quedan…
Con la esperanza del reencuentro
Y de forjar una liga de realidad y sueño…
Voy a crear un puente con tus propios sueños
Y con las profecías del encuentro.
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y que todas las profecías digan
que mañana seremos mejor que hoy

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Entre lo místico y lo real

El tiempo del encuentro…

Y llegará el tiempo del encuentro,
en el que a tu alma la redima el viento.
Con el perdón, que marcará tu rumbo,
y una lluvia de amor sobre mi piel añeja
que limpie sus culpas y hasta diluya rejas.
Y llegarás ante mí,
con alas rotas, con vasos vacíos…
…lleno de triunfos pero ya sin destino.
Sin esperanzas, desilusionado, acongojado…
Tratando de decirme
que acá para el hombre ya no hay desafíos,
pues el mismo hombre destruyó su camino.
Y te recibiré,
tal como te acepté el primer día:
con una sonrisa, y el calor de siempre,
aunque hayas perdido más de media vida.
Veré tus ojos y en ellos
la conciencia del hombre en colectivo,
y sus deseos de implorar perdón
por dejar correr el tiempo a su destino,
por destrozar nuestra tierra,
por olvidar sus retos y disipar sus sueños;
corriendo tras el oro virtual del desatino.
Entonces, podrás ver en mis ojos
la luz y el amor que he estado guardando
en mi torre todos estos años…
Y en el camino que me separa de ti,
escritas y en damero, las atesoradas
profecías que estabas esperando…


La esencia de la vida

En un jardín florido, detrás de las montañas,
anidan los amores de gente muy extraña.
Sueltan su pelo al viento, dejan sonar campanas,
y con el pensamiento se besan y se aman.

En una bella aldea, detrás del horizonte,
urgente y presurosa, veo pasar la gente.
Todos llevan sus flores y cantan sus canciones,
van perdiendo lamentos y dejando pasiones.

En una playa inmensa, que brilla junto al río,
Siento gritar tu nombre, galante amor mío,
Son las mil y una luces de fulgor reluciente,
Que buscan anhelantes prenderse a la corriente.

Más, yo perduro en el jardín florido,
nadando entre las rosas, sorteando las espinas.
Porque de andar caminos y de estudiar ideas,
me quedo en la montaña o en la bella aldea.

Me siento en la fuente de tu jardín florido
a esperar las auroras de la playa infinita.
Pero siempre a tu lado, aunque sorteando espinas
porque contigo obtengo la esencia de la vida.

Por encima de todo









Por encima de todo


Sandra Gutiérrez



Me vuelvo mar, me vuelvo cielo,
y me dejo trasportar por el Pampero,
que me lleva en invisibles esqueletos
a volar por encima de todo vuelo.
No soy barrilete ni alado señuelo,
sólo una paloma que revoloteo.
Y en el devenir de coros al viento
infinitas alas, atesoro y siento…

Extiendo mis alas, viro y planeo;
cuido de no darle tanta altura al vuelo,
para no alejarme de lo verdadero.
Y entre las tinieblas del pesado pueblo
busco a los humildes y en ellos me quedo,
curo las heridas, las mías, las de ellos;
ahuyento los miedos y les cuento cuentos,
porque el alma pide también su alimento.

Mas, me vuelvo mar, me vuelvo cielo,
y en un sueño etéreo de complejos tiempos,
solamente dejo pasar al Pampero…







Un día final

    Por el piso sus cartas desleídas. Y unas alas de seda bajo el vidrio dejan oír en lejana suspicacia “The Girl Is Mine”  y un Michae...