África me envió un mensaje.
Copulando está el desierto con la selva
sobre el extenso río de longitud amarga se ha enfriado la esperanza,
y calcinado la resignación en la larga espera bajo el sol.
Altas llamas sobre el horizonte se disuelven.
Inmensas sus distancias, abundantes sus riquezas.
Ellas siguen siendo la causa de su pobreza.
“El mundo sigue saqueando nuestras reservas.”
Los mensajes desde África vienen
como caramelos
dulces o ácidos
y los recubren vistosos papeles de colores.