El hilo de este reino


Este blog ha acompañado el crecimiento de mi humilde obra desde 2008. En él guardo versos improvisados, poemas que amo y letras sueltas, pero todos ellos conforman este puzzle que soy, un ser en crecimiento, una amante de la palabra, un sueño de poeta.
Sandra Gutiérrez Alvez (Salma)

lunes, 26 de julio de 2010

Rosas de azul tratadas



Rosas de azul tratadas
versión 2010

Hay cartas, simples cartas
de garabatos hechos en papel de seda
de tinta roja carmesí de puño y letra
y entre teclas, que no miden más que una moneda,
que pesan menos que el sufrimiento
y vuelan al compás del pensamiento.
Van por ti y por mi, viajando lento,
al compás del minutero y al soplar del viento,
creando caminos en el éter enlazando recuerdos
viniendo de atrás y adelante,
de voy vengo en un te quiero lejos
y un vente pronto hacia mi encuentro…

Cartas simples cartas.
Mezcla de gratitud con fantasía,
de ignota y fresca juventud
con armónicos acordes de nostalgia.

Habitante  de lejanas primaveras,
mientras abro las puertas de mi invierno.
dejo pasar un mayo más, eterno y sin recuerdos,
sin rosas en mi almohada... soñando con su aroma,
venidas en avión, de azul tratadas
que han viajado en perfumados cielos
donde volar, y concertar encuentros
es tan sencillo como soñar con ser amada…

Quizá  algún día , quizá algún día
el mismo sol corone nuestro cielo
y ese día de alas y de vuelos
en plenilunio sea nuestro encuentro…


Y ya no sea más ni gratitud, ni fantasía,
ni cartas, ni garabatos en papel de seda,
ni rojo carmesí de puño y letra,
ni viajes al compás del pensamiento…
Habrán abrazos, miradas y sonrisas,
será nuestro el encuentro de la ansiada prisa,
y habrá todo, todo lo que nos dio la vida…

Sandra Gutiérrez Alvez


Safe Creative #1007230004654

2 comentarios:

  1. Hermoso poema y con un final tan esperanzador que contagia.

    Saludos
    Jeve.

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  2. Buen día Sandra, me encantó esta poesía, es un placer leerte, está llena de dulzura, ilusión, esperanza y amor.
    Un abrazo.

    ResponderBorrar

Gracias por tu comentario.

Salma

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